A través de su incorporación a ANFACAR, estas empresas fabricantes buscan a través de su unión una mejor adaptación a los inminentes cambios normativos, así como defender los legítimos intereses empresariales del sector ante las diferentes administraciones competentes (Ministerio de Industria y Agricultura, Junta de Andalucía), servicios técnicos de homologación y reforma, fabricantes de proveedores de componentes, así como usuarios de estos vehículos y la sociedad andaluza en general.
Actualmente el sector de la fabricación de remolques agrícolas y maquinaria agrícola, tanto en Andalucía como en toda España, vive bajo una gran incertidumbre por la aplicación de los nuevos requisitos de homologación derivados del Reglamento UE 167/2013.